Si pudiera elegir un día para enfermarse, ¿qué día elegiría usted?, A lo absurdo de esta pregunta solo puede seguirle una respuesta igualmente absurda; Sí se puede elegir, entonces lo mejor es elegir no enfermarse ningún día y caso cerrado. Pero dicho esto, la realidad es que no podemos elegir, y efectivamente casi con certeza vamos a enfermarnos algún día, y de todo corazón espero para todo el mundo que ese día no sea uno del fin de semana.

¿Sí los hospitales trabajan en un modelo 24/7 no debería ser que diera igual ser admitido cualquier día de la semana?, pues resulta que no. Un estudio del Journal of the American Medical Association descubrió que los pacientes hospitalizados que sufrieron un paro cardíaco durante las noches y los fines de semana tenían menos probabilidades de sobrevivir. Igualmente, un estudio británico descubrió que los pacientes que ingresaron en un hospital un domingo tenían un riesgo 16 por ciento más alto de morir en un periodo de un mes posterior al incidente que los ingresados los días de semana. Sumándose al coro, científicos canadienses descubrieron que los pacientes con accidente cerebrovascular isquémico ingresados en hospitales el fin de semana tenían más probabilidades de morir dentro de los siete días que los ingresados durante la semana.

La pregunta obvia aquí es: ¿Por qué? La respuesta es una mezcla complicada de economía y cultura médica.

Durante la semana, todos los servicios de diagnóstico e intervención están abiertos mientras que, durante el fin de semana, muchos de ellos se cierran, excepto cuando se llama a los miembros del personal para atender un problema que pone en peligro la vida. El personal de guardia entiende que cuando la vida de un paciente depende de su experiencia, debe dejar de hacer lo que está haciendo y dirigirse al hospital. Pero la cultura de la medicina supone que hacer que un paciente estable espere hasta el lunes no será un problema.